Una técnica sencilla para el control de la erosión

Vetiver, una herramienta en la agricultura:

El sentido común indica que no es preciso labrar la tierra en pendientes muy fuertes, por la simple razón que con cada aguacero una finísima capa de la superficie es arrastrada. Con el paso del tiempo, la capa fértil se desgasta y quedando el suelo estéril, árido y sin vida (horizonte C o D). Sin embargo, la mayoría de los pequeños y medianos agricultores en Ecuador cultivan en pendientes sin precaución alguna contra la erosión.
En tiempos pre-colombinos, los indígenas bajo el mando del Inca construyeron sus terrazas y terraplenes, de los cuales aún se puede observar las huellas en el paisaje. Reanudar con esta práctica de construir muros de contención resultaría en obras muy costosas, además no siempre hay piedras y rocas disponibles en el lugar donde se requiere de terrazas.

Una solución más sencilla es la instalación de barreras vivas (en curvas a nivel) que, en el lapso de algunos años, se desarrollarían en terrazas ¨inducidas¨.

En las partes altas de los Andes las barreras se forman con el pasto Milín, o con Retamo, Aliso, etc.
En las partes bajas (desde 1500 msnm hasta el nivel del mar), la gramínea Vetiver ofrece el método vegetal de conservación del suelo más eficiente.

Vetiver, la barrera contra la erosión…una técnica muy antigua.

Al inicio de los años 1960, analistas financieros del Banco Mundial, Sr. Greenfield y Sr. Grimshaw, recibieron una consigna muy peculiar: durante sus misiones de análisis económico en los países del Sur debían buscar, inventariar y documentar un método sencillo, eficaz y de bajo costo para el control de la erosión.
En las islas Fiji, Greenfield observó que los cañaverales estaban bordeados de un pasto rígido y alto, capaz de frenar la erosión del suelo. Rastreando la procedencia de esta gramínea (ahí llamado Khus), descubrió que se había originado en el oeste de la India, en los pantanos de Bombay, en un clima muy húmedo y caluroso.
Grande fue la sorpresa de Greenfield & Grimshaw al descubrir durante sus misiones que en muchos países Asiáticos los campesinos aplicaban desde hace muchas generaciones la técnica de control de la erosión con la misma gramínea que encontraron en Fiji y Bombay. En India los agricultores lo llaman ¨Ramaccham¨ o ¨Vettiveeru¨ y lo utilizan para mantener cercos vivos alrededor de sus explotaciones agrícolas y reforzar las riberas de los ríos. En Indonesia lo denominan ¨Aga wangi¨ y se utiliza para delimitar los arrozales. En Sri Lanka se llama ¨Vilhalver¨ y se utiliza para establecer las terrazas en las plantaciones de té.
El análisis genético demostró que en todo Asia se utiliza la misma variedad cuyo nombre científico es Vetiveria zizanioides (L.) Nash.
Desde los 1990 Vetiver llegó a Suramérica a través de centros de investigación agrícola, uno de ellos por ejemplo es el CIAT (Centro Internacional de Agricultura Tropical) en Palmira- Cali en Colombia. Al introducir una especie, la principal preocupación es que ésta podría convertirse en una planta invasora, una plaga que amenaza la flora endémica. Afortunadamente, Vertiver no produce semillas; la única manera de reproducirlo es vegetativamente, por cepas o esquejes, de la misma manera que la Hierba Luisa (Cymbopogon citratus).
En 1996 se estableció una plantación de Vetiver en el Norte del Ecuador y desde entonces se ha distribuido a todos los rincones del Ecuador.

Las características de Vetiver.

Aunque a través de los años se ha ensayado la utilización de muchas hierbas y árboles como medida de prevención de la erosión, hasta la fecha sólo el Vetiver ha pasado la prueba del tiempo. Como queda de manifiesto en la enumeración de sus características que se presenta a continuación y que se deriva de observaciones recogidas en todo el mundo sobre la Vetiveria zizanioides, esta planta verdaderamente notable resulta ideal para el sistema vegetal de conservación del suelo y la humedad. No se conoce ninguna otra hierba que la iguale en resistencia y diversidad.
  • Cuando se planta correctamente (en forma de barreras en curvas a nivel), Vetiver forma rápidamente un cerco espeso y permanente.
Vetiver-Control-Erosión-Parque-Bambú-Ecuador

  • Tiene un sistema radicular fuerte y fibroso que penetra y fija el suelo hasta una profundidad de tres metros y puede resistir los efectos de la tunelización y el agrietamiento
  • Es perenne y requiere de un mínimo de mantenimiento
  • Su corona se halla bajo la superficie, lo que la protege contra el fuego y el exceso de pastoreo.
  • Es tanto xerófita como hidrófita y una vez establecida puede resistir sequias, inundaciones y prolongados períodos de anegamiento.
  • No compite con las plantas para cuya protección se la utiliza.
  • Crece desde el nivel del mar hasta 1300 msnm. En algunos microclimas favorables puede llegar a los 1500 msnm. No prospera en climas donde la temperatura baja de los 18º centígrados. (Es decir: NO es apto para proyectos en la Sierra)
  • Es una planta perfectamente adaptada, de modo que aun cuando todas las demás plantas de los alrededores han sido destruidas por la sequía, inundaciones, plagas, enfermedades u otras circunstancias adversas, el Vetiver permanece en su lugar para proteger al suelo de las próximas lluvias.
Mayor información sobre las aplicaciones de Vetiver se puede encontrar en la página web de la Red Internacional de Vetiver www.vetiver.org